Afortunadamente es difícil contemplar una biblioteca derruida si no es en tiempos de guerra o de dictadura, sin embargo acabamos de encontrar otro bibliobús abandonado a su suerte en la cuneta de una carretera, como si de un nuevo Polinices se tratara, que al igual que aquél, se le negara enterramiento y honores funerarios por traicionar a sus ciudadanos.
Nada más lejos de esta realidad nuestra, y nada más contrario a la recompensa de su labor.
Se trata de un bibliobús de la Diputación de Sevilla que entró en servicio en 1972. Después de toda una vida procurando lectura, alegría, ilusión, bienestar y tantos y tantos beneficios derivados de su labor, hoy yace con su esqueleto descarnado y derrotado por los elementos y el olvido.
!Buen exponente del peso de la cultura y de su patrimonio en nuestra sociedad!
No creo que haya muchos ejemplos originales de cómo se expandía la cultura hace cuarenta años en este País nuestro, como para permitirnos el lujo de mirar hacia otro lado ¿Tan imposible es encontrar una Antígona que procure las honras que se merece a esta biblioteca ambulante? Serán también honras para nosotros mismos, para nuestra condición de personas, pues unos cuantos de nosotros adquirimos parte de los que somos en estas bibliotecas.
Feliz Día de Difuntos.
http://druta.wordpress.com/2010/07/04/el-bibliobus-de-la-sierra-de-gibalbin/
http://www.bibliobuses.com/mes2009septiembreveteranos.htm